Tu mirada ha conseguido una bellísima imagen con la que traspasas la fugacidad del instante, la eternidad de lo infinito. Es tan frágil la belleza y sin embargo se nos asombra el alma con su asomo. Nunca podremos sustraernos del asombre cuando despiertan los colores del arco iris, ni nos dejará de sorprender el fugaz aleteo del colibrí.
Un abrazo, artista. Tus imágenes despiertan mi imaginación.
Pobrecito! Son tan frágiles! me encantaron las fotos.
ResponderEliminarSoy Nora.
Gracias Nori...
EliminarTu mirada ha conseguido una bellísima imagen con la que traspasas la fugacidad del instante, la eternidad de lo infinito. Es tan frágil la belleza y sin embargo se nos asombra el alma con su asomo. Nunca podremos sustraernos del asombre cuando despiertan los colores del arco iris, ni nos dejará de sorprender el fugaz aleteo del colibrí.
ResponderEliminarUn abrazo, artista.
Tus imágenes despiertan mi imaginación.
í
Eros y Thanatos...creo que no se puede evitar pasar por allí a la misma vez.
EliminarGracias Bea, tan atenta como siempre.Abrazo
muy buenas tus fotografias!!!me gustan!!!son muy personales!
ResponderEliminarun saludo, Arka
Gracias Arka, si fue una búsqueda lejos de lo esperable en mi.
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